Cada día en España se vierten 126 toneladas de plástico al Mediterráneo. Son datos sonrojantes, recogidos por Tapp Water, que nos sitúan como el segundo país más contaminante de Europa. Con el objetivo de no contribuir a esta penosa cifra y conseguir un planeta más sostenible, en La Grosella todos nuestros platos se sirven en envases compostables.
Esta contaminación nos afecta directamente. La investigación ha concluido que el 92% del agua embotellada mundial está contaminada por microplásticos. El agua del grifo (83%) tampoco se libra de las inoculaciones. Sin duda, es el momento de hacer algo.
Envases compostables
Los envases alimentarios derivados del petróleo causan problemas a distintos niveles como cambios en el ecosistema, migraciones y daños en la fauna y la flora. El remedio más eficaz para reducir este devastador impacto en el medio ambiente es la utilización de envases compostables.
El 90% de este material se degrada en un plazo de seis meses en entornos ricos en dióxido de carbono. Su baja concentración en materiales pesados y la ausencia de productos tóxicos y contaminantes en su fabricación facilitan este proceso.
En datos
Todos los envíos de La Grosella se realizan en envases biodegradables y compostables libres de plásticos. Cada día entregamos 600 menús en envases individuales, repartidos en 600 primeros, 600 segundos y 600 guarniciones. La suma de estas cifras hacen un total 1.800 unidades al día y 37.800 envases al mes. Este proceso nos ha permitido ahorrar más de 450.000 recipientes plásticos.
En La Grosella estamos muy comprometidos con el medio ambiente. Esta implicación determina nuestra obligación de reducir al mínimo el uso de plástico, por eso todos nuestros platos se sirven en envases compostables. Todos tenemos la responsabilidad de cuidar y mantener nuestro planeta en las mejores condiciones.
En La Grosella | España, el país más saludable del mundo